en mi vida existen tantas paradojas, paradojas que por lo general yo misma créo.
odio y amo a la vez, y eso es lo que mas me aterroriza
¿como puede ser que no soporte a la gente que va en la micro, pero cuando la micro esta vacia solo kiero que suba gente?
odio ver como la gente se descuida de si misma, como hay gente sucia, gente sin modales, personas prepotentes, e incluso personas feas. pero a la vez quedo casi en estado catatonico cuando una persona es amable. admiro a la gente que se sacrifica todos los dias por sustentarce y se esfuerza, pero odio que esas mismas personas invadan mi especio vital.
odio a la gente que se expresa mal, pero a la vez esa es una de las cosas que mas me hace reir y por ende me alegra el dia
detesto que cuando se sube alguna persona de edad nadie atentamente se levanta de su comodo asiento y lo sede con toda amabilidad, pero cuando estoy en esa situacion, realmente recuerdo cuanto cuesta.
odio que el micrero de turno pare en cada lugar que haya una persona pidiendo un aventon, pero cuando yo estoy esperando la micro le deseo las diezmil maldiciones y mas al micrero que no quizo parar.
odio a la gente que va con mal semblante, solo hasta el momento que recuerdo que mi cara tambien demuestra tristeza, enojo, cansancio y cierro mis ojos un segundo y recuerdo las cosas lindas de la vida o alomejor un simple chiste y cuando vuelvo a abrir mis ojos la misma persona desagradable que va a mi lado se convierte en un hermano o algo asi, una especie de compañero que aunke sea por un instante comparte conmigo el mismo espacio, la misma situacion e incluso el mismo aire (odio que la gente respire mi aire) y muchos de los defectos que al principio de mi viaje odie los paso por alto, y solo rescato las cosas buenas apesar que todo lo malo sigue estando ahi. simplemente paradojico al igual que toda mi vida.